Con mucho regocijo, los vecinos de la colonia San Ignacio de esta capital celebraron a su Santo Patrón en la conmemoración de su memoria litúrgica. Presidió la celebración el padre José Calderón, junto al diácono Cesar Pineda.
Texto y fotos Eddy Romero
Con el objetivo de hacer todo para la mayor gloria de Dios, a ejemplo de San Ignacio de Loyola, los fieles de la parroquia del mismo nombre celebraron con mucho entusiasmo la fiesta patronal en honor al santo. Previo a la celebración se rezó el Santo Rosario para preparar el corazón para recibir a Jesús en la Eucaristía.
El padre Calderón dijo en la homilía que las lecturas de ese día evocaban ese llamado que Dios siempre hace. Asimismo, expresó que las mismas situaciones cambiantes que suceden en la actualidad en nuestra sociedad, fueron las que vivió San Ignacio en su época, por lo que el ejemplo de su vida sirve de mucho para forjar el camino espiritual que Dios pide a cada fiel.
La parroquia se preparó con una novena, en donde cada día había una intención especial, por el que orar. San Ignacio siempre decía que todo había que hacerlo para la mayor gloria de Dios.